¿Qué es exactamente? ¿Es importante? ¿Qué pasa si se acaba? Te lo contamos sin tecnicismos innecesarios, en un artículo útil, claro y directo, como nos caracteriza en #GnG 💚.
El AdBlue es un líquido compuesto por agua desmineralizada y urea (sí, urea, pero de síntesis, no pienses mal). No es un aditivo del diésel ni un componente del motor, sino un producto auxiliar que se inyecta en el sistema de escape de los coches diésel.
Su función: reducir las emisiones contaminantes, concretamente los óxidos de nitrógeno (NOx), que son especialmente perjudiciales para la salud y el medioambiente.
👉 Es parte esencial de la tecnología SCR (Reducción Catalítica Selectiva), obligatoria en muchos vehículos diésel desde la normativa Euro 6.
🔍 Si tu coche lo necesita, lo sabrás: lleva una boca de llenado para AdBlue, normalmente al lado del depósito de combustible o en el maletero.
Aquí viene lo importante: si se agota el AdBlue, tu coche no arrancará. Literalmente. Aunque el depósito de gasoil esté lleno.
No es una avería, es una restricción legal: el coche está programado para bloquear el encendido cuando no hay suficiente AdBlue.
Además, si circulas con el nivel muy bajo, puede encenderse la luz de fallo de motor, limitarse la potencia o activarse un modo de emergencia.
Depende del coche y del tipo de conducción, pero como orientación:
✅ Algunos coches muestran una cuenta atrás en kilómetros restantes.
✅ Ojo: no lo ignores. Cuando dice que quedan 2.400 km, no se trata de una advertencia vaga. Se agotará… y no arrancará.
💡 Consejo de taller: usa guantes y no lo derrames. El AdBlue es corrosivo para algunas superficies y puede dejar manchas si no se limpia bien.
Sí, algunos tips rápidos:
En #GnG 💚 revisamos y rellenamos tu AdBlue. Un vistazo rápido, un consejo profesional, y tu coche sigue funcionando sin sustos. Porque cuidar el AdBlue es cuidar tu motor, tu salud… y tu tranquilidad.